lunes, 1 de mayo de 2023

Peñalara por Risco Claveles y Peña Citores

Ojeando el calendario y cuadrando los deberes que me vienen, justo la semana en que por La Pedriza hay un festival de montaña la tengo sin rellenar y pocas más escusas necesito para hacer un sold out de lunes a domingo. En casa dejó caer el plan y  sin poder unirse a todo, los días que tiene de libertad.. allá que va; así que rápidamente, para no dar opciones a que cualquier cosa me tiré por la borda los planes, preparo equipaje, materiales varios y buenas bolsas de víveres.. rematándolo todo con muchas ideas para pocos días.

Carretera y manta voy "pal" sur, mientras casi todo el mundo vuelve para casa después de dos bonitos días para lo que sea hasta para lo que parece que no es trabajo 😜 pero sí. Los montes conocidos van disipándose en el horizonte que dejo tras de mí y viendo montañas desconocidas cruzo las apacibles tierras castellanas  paréntesis incluido hasta entrar en pleno epicentro de la península, donde el estrés se siente incluso en el aire. Incapaz de coger ese ritmo, pero tampoco queriendo, como un caracol llegó a la vertiente septentrional de Guadarrama y viendo una redondeada cima, que por los pocos restos de nieve que le quedan intuyó que es Peñalara, me asiento en el valle de Lozoya para unas horas.
Aún de noche, prendo la mecha de la jornada.. una jornada fría que bien se anunciaba en la cartelería, Rascafría 😜, y que del saco me hace meterme entre varias capas de gruesa ropa y arrimarme al hornillo hasta que el café está hecho. No dando tiempo a que el café temple en el ambiente sino en el estómago; antes de que el mundo empiece a rodar a toda velocidad, arranco hacia el puerto de Cotos. 

Queriendo que el inesperado fresco no recale en el cuerpo de nuevo,
 pongo pies en polvorosa con ninguna compañía en los alrededores
del puerto de Cotos y me adentro en los parajes de la Sª de Guadarrama.
A la sombra de los pinos entreviendo al sol, voy siguiendo los carteles
 en dirección "sufrida" a la cima de Peñalara compartiendo el camino,
 casi autopista, con un par de veteranos grupos ...
... pudiendo ver y escuchar a los pajarillos
  
es lo que tiene el respeto al lugar en que nos encontramos ...
... para tras un primer baño solar junto a su ración de bloques graníticos,
 ponerme frente a la más grande de las cima de estas montañas
y a las puertas del pequeño refugio Zabala. 
Oteando desde "la terraza" del refu la laguna grande y sus humedales, 
un majo corredor me alcanza y tras conversar con el unos instantes del
 camino que casualmente compartimos.. a la vez nos lanzamos por difusa
 traza al circo de Peñalara, negociando cada paso con piedras y bloques
 inestables acabando  en su fondo y a orillas de la gran laguna.
Un pequeño despiste todavía en compañía,  mas una indebida
 bronca de unos estudiosos por "cruzar" la valla que en verdad
no habíamos cruzado 
si algo nos debe caracterizar a las gentes de la montaña es el respetar 
me hace rodear de más las cristalinas aguas de la laguna.
Enseguida el GPS de la cabeza recalcula ruta y por las faldas
 de las escarpadas alturas desprendidas de Peñalara  ...
... a la vez que domino sobre todo el valle de Lozoya ...
... continuó pateando hacia arriba sin apenas notarlo por clara senda sin
compañía o alboroto entre zonas de "cariñosos" matorrales combinadas
 con mucha piedra en mitad del camino ...
... y otras de pequeños cauces, lo justo húmedos ...
... por la escasez de nieves que se nota en estas fechas en estos altos lares
 y en un periquete me encuentro con la laguna de Los Pájaros, donde alcanzo
 a otr@s con mis mismas intenciones.
Sin darme ni cuenta en cuatro pasos más, monto sobre el rocoso cordal que se desprende al N desde Peñalara. La hora que es y una brisa fresca ,que da la bienvenida,  me hacen buscar un rincón donde echo una parada con degustación y de paso admiro el panorama va a quedar atrás, el valle de Lozoya y las tierras segovianas de La Granja.
Enfilado por la ancha divisoria del risco del Pájaro, un veterano
de tierras lejanas se me cruza ya de bajada mientras subo con
el mayor problema de buscar un apoyo estable a los pies entre
 tanto pedregal y tímidos restos de duras nieves ...
... para bajo los escarpes del risco de los claveles, abandonar el trillado camino.
Otro más "salvaje" me obliga a echar manos a la roca y trepando unos metros
 con buenos agarres por unas encajonadas gradas salgo al filo ...
... hogar de infinidad de "lugareñ@s"
que ni se inmutan por mi presencia ...
... y alcanzo, con apenas unos fáciles pasos por bloques
 de granito, lo alto del Risco de Los Claveles.
Algo de diversión se interpone entre mi y la cima. Un destrepe
me deja en una pequeña brecha de la que salgo al instante con otro
jugar de manos y pies, momento en que apunto directo a cima.
Fácilmente cresteo colgado sobre la vertiente que cae al circo
de Las charcas y en cuanto los riscos quedan atrás...
... peleo unos pasos más cuesta arriba y "
pongo la bandera" en la cima de Peñalara (2428 m).
Foto en el techo de la Sª de Guadarrama,
 Peñalara (2428 m) .

Tan agusto que se está y compartiendo el lugar con poca gente, tomó
 buen asiento otra vez y para un rato. Todo lo que me rodea es nuevo
y me pierdo un rato en intentar conocerlo. Cuerda Larga, con la
inconfundible Bola del Mundo y cotos de donde he salido hacia el S y E ...
... al N los riscos que acabo de recorrer, el valle de Lozoya, la Sª de Ayllón y las llanas tierras de Segovia ...
... y al W cerca mi siguiente destino y allá lejos
 unas llamativas alturas todavía blanqueadas que
todavía estoy con ganas de saber que podían ser 
se acepta ayuda desinteresada
🤪.
Justo antes de que la cima se colmate, vuelvo a la carga .
Rápido entre gentes que suben, con el circo de Peñalara
al lado izquierdo, desciendo al collado de dos Hermanas ...
... donde abandono el camino normal, que por las zetas
va directo a Cotos; yendo con un tranquilo baja y sube
 por caminos poco pisado a Peña Citores.
Desde el pequeño alto, a una última mirada
a la cumbre de Peñalara le sucede el vislumbrar el
camino. Tras bajar lo que parece una senda, algunos
 hitos y unas trazas entre vegetación y granito ... 
... por unos cuantos metros, el entorno
 se vuelve salvaje y las opciones son
las de siempre.. seguir o volver. Sin dudar ... 
... entro al trapo, aventurándome cuesta abajo entre caos de bloques
 y el encantador pinar de Citores, correteando cual animalillo por estos
 parajes ibéricos no dejando ni el más mínimo rastro de paso y saliendo
 tras medio kilometro vertical de desnivel a la GR 10; por la que regreso
 al pto. de Cotos , viendo la aventura su final aun quedando más por estas alturas.
18 abril'23
⛰️Del Rìo⛰️

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