Después de un día alegre, viene uno "triste" y así se va el finde en carrusel.. pero hay para quien "lo sano" viene después. Ello me lleva a lo de siempre ⛰️, ahí donde uno "pace". Sin dar tiempo a acabar la semana preparo zapatillas, mochila, alguna cosilla más que ya nada tiene que ver con la nieve, aunque puede que haya y toque recular y con un ligero equipaje el ansia va dando paso a una nueva semana y al lunes.
Mientras el mundo funciona con normalidad, uno se sale de la línea. Tirando al Sur, dejo el pirineo y las montañas de casa a la espalda, hacia la España profunda y vaciada donde abundan más animales salvajes pero que no destruyen todo a su paso que "monstruos de dos patas" que arrasamos con todo.
De camino a "tierras de torreznos" hay algo para hacer y como el tiempo ahora sobra, no dejo pasar la oportunidad. Ligero desvío me hace recalar en tierras riojanas y acabar echando el ancla en Arnedillo, entre verticalidades y angosturas con la idea de hacer la recién estrenada ferrata de la Lombera.
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Puestos los ojos desde el primer momento en esas dorsales rocosas que casi caen desde el alto de La Peña del Castillo, en breve paseo recorro un tramo del camino de las ermitas a dar con el pie de la ferrata casi casi nueva a estrenar. |
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Equipado con lo mínimo más aledaños, que no usas pero por si acaso, arranco para arriba superando fáciles escalones y placas ... |
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... combinando con tramos de andar, que dejan cautivarse con el escarpado entorno ... |
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... mientras el suelo firme y las aguas del Cidacos quedan alla abajo ... |
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... y sigo subiendo buscando la diversion en la adherencia de la roca, sus multiples agujeros y cantos; pasando totalmente de los hierros ... |
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... hasta que tras poco más "alante" de un inevitable segundo puentecito, el tema cambia y a mi espalda veo el valle del Cidacos y sus alturas. |
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Con más ambiente del que ha habido hasta el momento y el final tocando a la puerta, afronto unos breves y divertidos pasos colgados ... |
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... continuando con un pequeño cresteo, encaminándome hacia lo más alto del peñasco ... |
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... para al poco destrepar primero a un pequeño collado y de ahí al final de la vía. |
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Finita la emoción, uno piensa en volver tranquilamente.. pero la realidad es otra. Buen y tieso bajadón, en el que un descuido te hace catar suelo, vuelvo a los pies del peñasco a toda velocidad ; para aprovechando la carrerilla ir hasta el pueblo de nuevo y por la siguiente. |
20 marzo '23
⛰️Del Rio⛰️