lunes, 31 de agosto de 2020

"re-SOBRÓN": la ferrata al completo

Aquí nos plantamos
en el incompleto Sobrón.
Hace algo más de un año con dudas de poder, por sensatez dejamos incompleta la aérea Ferrata del Sobrón. Lo que la hizo pasar a la lista negra de "espinitas". Por si no era suficiente a lo largo de este atípico verano, tuvimos una frustrada tentativa a la misma y el resultado fue peor que el anterior. Ni poder ir a intentarlo. Si antes le teníamos ganas, ahora estás se salian de la escala y la cosa no podía quedar así.
Como a Elena la tenemos temporalmente con las botas colgadas, hacemos en el mercado de verano un nuevo fichaje : " la pequeña delrioalmonte". Pero no queda así la cuadrilla. Unos empiezan a animarse, otros se caen del plan y acabamos por quedar un buen grupo de casi 10; apurando el nuevo límite impuesto en Pais Vasco. 
A punto de finalizar la semana se nos une el más importante de tod@s, quien no nos podía fallarnos .. El buen tiempo.

Al mismo tiempo que otras tantas quedadas montañeras nos juntamos en el parking del Decathlon y partimos hacia la Sakana, sumida entre nieblas. Recogido el uhartearra, carretera y manta. Las nieblas y cuatro gotas que se escapan se despiden al salir de Navarra y entrar en la llanada Alavesa, quedando el día según lo acordado. "Sol y cielo azul. 
Zigzagueamos entre la muga de Álava y Burgos, vemos al fin, allá lejos alzarse la cresta del sobrón. Asomando agresiva en el paisaje, como una aleta de tiburón en el mar. En poco damos con las orillas del Ebro y a su par nos aproximamos hasta Sobrón perfectos de hora, a pesar de unos y otros contratiempos, para cojer el material. Justamente bajamos del coche y ya estamos llenando el buche, aunque mientras nos vamos preparando con toda la cacharrería. Mirando arriba, varios ya están por allá colgados y otros tantos que van subiendo hacia ella; así que nosotros sin dormirnos en los laureles, comprobado que todo bien.. tiramos a buscar el inicio de la arista.

Via Ferrata de Sobrón
Via ferrata que recorre la aérea cresta de Sobrón. Se distinguen tres tramos. K2 muy facil y corto. Seguido de un K3 mas largo, con pasos aéreos y algun paso mas complejo. Termina con un K4 de igual longitud que el anterior con varias trepadas exigentes y pasos muy estrechos por la cresta.  Datos GPS: 2'5 km; ± 200 m; 4-5 h.

Por la orilla vasca del Ebro, nos acercamos hastas las ruinas del viejo balneario de Sobron y de primeras subimos buen cueston por las laderas de la Sª de Artzena ...
... que nos deja en el inicio de la arista y ferrata del sobrón.
Arrancamos la ferrata por una facil sucesión de pequeñas crestas con trepadas ...
... entrando en la dinámica de pocas grapas y recorrido afilado ...
... que termina, sabiendonos a poco,
donde de verdad empieza la faena.
Continuamos en esta segunda parte, ganando altura de primeras por el expuesto filo
 con algun pasito "peleón" ...
... dejando a los pies las tierras del Ebro y alla lejos la Sª de Kantabria ...
... mientras en la otra vertiente se extiende el embalse de Sobrón ...
... en la que echamos las manos para seguir fácilmente por repisas laterales ...
... de las que destrepamos 
por un monolito con grapas y panza ...
... y  sobre la delgada línea del Sobrón, haciendo equilibrismos o "montando a caballo" avanzamos ...
... hasta la amplia horcajada,dando fin al K3 
y sin dudar mirando ya al K4.
Antes de entrar al último y más complicado de los tramos; a la sombra en el collado recuperamos energías hasta que la impaciencia de entrar al tema se "desborda".
Volvemos a subirnos a la cresta, dejando el suelo firme atrás por trepadas con algo más de  "carácter" y todavía menos grapas  ...
... que nos deja en lo alto, para afrontar otro vertiginoso y estrecho tramo ...
... tras el que bajamos a una brecha, brecha, donde nos plantamos la otra vez .
Sin dar tiempo a las dudas, atacamos el empotrado paso vertical que nos adentra con enganchones y resbalones , sin posibilidades de "rajarse", en terreno desconocido y vertiginoso ...
... sobre el que no duramos ni un suspiro 
y descendemos por las grapas de un muro vertical ...
... a una pequeña repisa , con un imponente diedro
 de "tragar saliva" ...
 ... y "echando el resto" , buscando buenos agarres a un lado y a otro de la grieta o buscando "apoyos artificiales" en algún compañer@, lo superamos no con pocas dificultades ...
... para intuir desde lo alto del muro el final de la vía...
... dirigiéndonos a este por travesías verticales y pasos de funambulismo, 
antes de una destrepada con "los pies a ciegas" ...
... para descender , a una última estrecha rampa 
que nos lleva hasta el final de la ferrata.
Perfilando los paredones orientales de la arista del Sobrón; retornamos por una senda sin dificultades ni pérdida, pero expuesta en su mayoría a "proyectiles de las alturas", hasta el punto de inicio a orillas del río Ebro.

La fresquita recompensa no se hace  ni esperar. Casi sin quitarse los artilugios ya está en manos de alguno y la cabeza maquinado que llevar a la boca.














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miércoles, 26 de agosto de 2020

Rincones del Baztan y la Ultzama

En un fin de semana algo diferente,  acompañado de la familia en un día, lejos de lo que la ficción nos pinta, nos vamos hasta un soleado Baztan. Engullidos por verdes parajes y bonitas montañas plagadas de bordas y ganado, nos adentramos en uno de sus escondidos "tesoros", Infernuko Errota. Un poco, tirando a casi nada, hacemos hueco en el estómago con el paseíllo  para las delicias del Asador Ordoki. Manjares de la tierra, que se comen y disfrutan sin hambre.
Tras el buen rato a la mesa, aún queda por delante parte de la tarde. Que aprovechamos para recorrer las calles de Elizondo y ver algún escenario de película. 

Desde Etxebertzeko borda a la sombra de bosque Atlántico,
una agradable y facil pateada ...
... llena de verde y vida salvaje ...
... nos lleva a la par de la Regata del Infierno ...
... hasta su más recóndito paraje, donde se encuentra enclavado Infernuko Errota.
Una calavera nos da la bienvenida ...
... y en su oscuro interior, todo restaurado, nos hace ver cómo
 fueron aquellos últimos años clandestinos moliendo el maíz.
Volviendo hacia Arizcun, un alto en el camino más que justificado. Vistas hacia el N, Larrun como protagonista.
Sin duda lo que más recordarán .. Asador Ordoki,
 adornado al detalle y de la comida ni hablamos.
Las calles de Elizondo con el río Baztan atravesándolo ...
... la iglesia de Santiago Apóstol  ...
... y escenarios de película. 

Resistiendonos a despedir el dia definitivamente, a medio camino de vuelta nos desviamos a la Ultzama y lo estiramos un poco más. Con corto paseo por las faldas de Arañotz, nos lleva a poner la guinda al día con el impresionante roble milenario.

Por las faldas de Arañotz, una amorosa pareja de caballos ...
... que al quedar  atrás "conducimos' hasta el enorme e impresionante roble milenario.
Foto finish en familia a la sombra del roble milenario de Arraitz-Orkin.

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viernes, 21 de agosto de 2020

Trail al Tuc de la Solana de Llauset (2674 m)

El día de vacaciones hay que, y no quien, se lo toma tan enserio que ni siquiera suena a su hora. Al final, nada más un "pelín" más tarde de lo mandado, abrimos los ojos a un nuevo mundo de cielo azul. 
Como hemos sido espabilados y alguno tiene las ganas de marcha rebosantes todavía, los rudos atuendos se ven relegados por los más ligeros. Aunque uno tirara como cabra "descarriada" monte arriba y Leyre con mismo camino, disfrutará del entorno más apaciblemente. Mismo camino, distintos conceptos y mismo fin.

Justo cuando las primeras luces casi han tocado las orillas del embalse, Leyre está terminando de prepararse y uno anda cada vez más impaciente por salir. Dándole un par de vueltas al tema, si me adelantó, igual puedo alargar un poco más la vuelta para "estirar las patas".No espero más. Me calzo zapatillas y en solitario salgo por el único camino que nos lleva hacia el "corazón" del salvaje pirineo. 

Tuc de la Solana de Llauset (2674 m)
Corto recorrido de trail por el entorno del Cap de Llauset, ascendiendo a la tuc de la Solana. Datos GPS: 7'4 km; ±550 m; 2h30'.

Otra vez por la GR bordeó el embalse y subo hasta el refugio e ibón de Botarnas, haciendo entrar en calor al cuerpo con buen ritmo y casi pudiendo seguir el rastro de las húmedas pisadas de la jornada anterior.
Dejo la bonita arista de Roques Blanques  atrás, adornando el horizonte ...
... y sin perder la GR tiró hacia arriba
 por pisado camino a la par de una rocosa y herbosa barrancada ...
... llegando en poco más de media hora al Ref. de Cap de Llauset, respirando soledad y aire a bocanadas.

Momentos más tarde por los mismos lares,  sale Leyre con mirada más detallista ...
Foto de Leyre
... mientras rodea las cristalinas aguas del Embalse ...
Foto de Leyre
... alimentadas por varias barrancadas, encaminándose  junto a una
de ellas hacia Botarnas de nuevo, pero con diferente destino.
Foto de Leyre

Habiendo sabido a poco y no viendo a nadie por cerca, lo que conlleva 
esperar por largo, decido tentar hacia la cima de la Solana.
Siguiendo la laberíntica GR por la cuenca del Cap de Llauset, en un pequeño apretón subo hasta el Coll. des Estanyets ; donde comparto vistas y charla con una agradable pareja Alavesa haciendo la transpirenaica y varias personas más.
Separándome de la GR por la que siguen todos,  ganó altura por el tieso e inestable terreno de la vertiente N  dejando a mis pies el ibón del Cap de Llauset ...
...  hasta que sin mayores dificultades que echar un poco las manos, llegó a lo alto del Tuc de la Solana de Llauset (2674 m) en pleno espectáculo montado por el salir del sol.


Por abajo la reportera no se duerme en los laureles y sube hacia el refugio ...
Foto de Leyre
... siguiendo la ornamentada senda pirenaica ...
Foto de Leyre
... hasta pasarlo de largo al no ver ni un alma 
y desde la orilla de un seco iboncillo ...
Foto de Leyre
... se encamina hacia las alturas por las que me encuentro.
Foto de Leyre

A la vez,  apuntó a las bajuras de Llauset y me tiro cuesta abajo siguiendo las pisadas de subida por las laderas de la Tuca de la Solana ...
... cruzandonos a orillas del ibón de Llauset, donde "la radar" me pilla volviendo a toda velocidad ...
Foto de Leyre
... y acabamos por reunirnos al lado del refugio del Cap de Llauset, sentandonos un rato a disfrutar los dos solos del lugar, sus vistas y el aire puro.
Con una rápida y bonita bajada, sin la presión de que una tormenta te pise los talones, regreso a la presa de Llauset habiendo hecho gana de desayuno y poniendo fin a unos días de pura montaña.














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