10 marzo 2025

“La pequeña montaña de Jaca”: Rapitan (1126 m)

Ubicadas tablas y material duro en dique seco para breve lapso de tiempo  o esa es la idea aun nos queda “un cartucho” más que gastar por el monte.. pero esa historia va después de merecido festín y su posterior “posado de oreja”.

Amaneciendo sin prisa y con expectativas no muy altas.. ir con calma, respirar aire puro y echar una buena mañana allá donde nos gusta. Nos rondan algunas ideas por el valle del Aragón y en los últimos coletazos del desayuno, ya casi decidid@s, se nos ilumina que el monte Rapitán siempre queda para la siguiente a cada vuelta a casa y mira.. ya NO más.  
Con mochila ligera y zapatillas, salimos en coche todavía falta entrenamiento y horas para “tareas” largas del valle y recaemos en territorio urbanita de par de mañana. A las afueras de Jaca aparcamos y nada más echar pie a tierra, estamos en las faldas del montecillo de Jaca y al corto lio. 

Sin miramiento el terreno se inclina desde el primer
 momento y despacito pero con buena letra  más un poco
de esfuerzo, vamos subiendo por estrecho sendero …
… al cobijo del denso pinar …
… hasta que al poco nos sorprenden drops y peraltes,
quedando claro que estamos en un descenso de bicis …
… por lo que ojo a lo que pueda venir. Extremando precauciones y agudizando sentidos, continuamos ganando altura por un lado del camino mientras el panorama se va abriendo sobre el llano jacetano …
… y alcanzamos sin problemas los muros
del fuerte gemelo de Ezkaba, El Rapitán.
Dirección E, rodeamos los fosos por admirar desde esta pequeña altura en casi
 360º.  Primero las montañas que separan el valle del Aragon del de Aisa …
… en la vertiente N, entre nubes y color blanquecino, los montes que preceden a Collarada …
… cerrando el circulo por el W.. donde poco se deja ver y algo
“descafeinad@s” volvemos frente a las puertas del fuerte.
Buscando alargar lo bueno, en un pequeño mirado sobre Jaca nos detenemos plácidamente. El panorama es de sobra conocido, pero la paz que se respira en buena compañía merecen el dejar pasar ese tiempo, que LO VALE TODO y así TODAVÍA MÁS.

Al final la historia siempre se repite y por una parte más nos vale. Tomando
el camino normal del Rapitan, dirección Jaca vamos para abajo sin pérdida …
… deshaciendo el desnivel en un abrir y cerrar de ojos, a cada
cual nos devuelve a la realidad.. una frente a una pantalla
por ahora 
y otra guiando por “the north lands” 🐻‍❄️.
Ós

07 marzo 2025

“Último vals tablero del invierno”: Marcadau Norte

Igual que en casa, la cena del guarda de Bachimaña es el colofón a quizá EL DÍA de nuestra temporada invernal.. pero todavía sin saciar las ganas de monte y esquís, le damos carpetazo temprano para descansar porque mañana toca una pequeña cima recomendada desde “nuestro hogar por un día” y aunque no se vaticina una jornada “épica”.. la posibilidad ahí está 😋.
Compaginando horarios de casualidad con los compañeros ingleses, l@s cuatro despegamos las sábanas a una hora decente, dejando tiempo a que la nieve vaya a estar en su punto o debería estarlo . Desayunar tranquilamente, a placer. En lo que los cielos van prendiendo la luz.. terminamos de acicalarnos  para la acción de nuevo, veloces zanjamos las cuentas pendientes y saliendo sin dejar escapar ni un instante; casi casi.. del calor del catre, pasamos al frescor de un blanco escenario con un grisáceo color de fondo.. que poco importa , porque montamos sobre las tablas y salimos a por el Pico N de Marcadau. 

Quedando a la espalda sol y cielo azul que quieren hacer
acto de presencia, el ref. de Bachimaña sigue el mismo camino …
… al volver a bordear por la marcada traza el Ibón Inferior, pero al “caer” en la helada superficie del superior, la dirección es diferente a la vez anterior. Sin perder nuestro rumbo que coincide con otras tantas huellas, llaneamos en total soledad dirección a la frontera …
… cruzando a la otra orilla por pleno ibón …
… dejando a un lado el terreno “alpino” de Infiernos y el valle de los ibones Azules para encarar hacia los ibones de Pecico, con un objetivo poco ambicioso para esta ocasión 😉.
Sonriendonos la suerte al engancharse las nubes por Infiernos, tiramos para las alturas, ganando metros en zigzag sobre la cuenca de Bachimaña por nieve prieta …
… apareciendo ,tras casi todo el desnivel de la ruta, cara
a cara con Gran Facha y “oliendo” los ibones de Pecico …
.
… quedan de lado para terminar de acercarnos a
 la frontera y las cercanías del puerto de Marcadau.
Intentando seguir sobre los esquís, no tardamos en cambiar
 a crampones y avanzando todo tieso junto al rocoso cordal …
… hollamos la cima de Marcadau N (2676 m) , asomándonos
a territorio vecino con el valle de Wallon-Marcadau a nuestros pies.
Foto de cima en Marcadau N (2676 m).
☝y Leyre.
El ambiente no invita a pasar demasiado rato arriba. Con todos los sentidos,por el viento que sopla, quitamos focas y admiramos el panorama. Pic de Marcadau en primer plano y detrás las alturas mas orientales de Tena …
… hacia el otro lado, nuevamente en todo su esplendor , Vignemale …
… y cerrando el circulo, LA GRAN FACHA y su “vecindario” montañoso..  que nos ponen ante la diversión, quizá la última del invierno para un servidor.

Lo que deseábamos a primera hora, ya sabíamos que no se cumplía y con total tiento salimos de la cima. Surcando una nieve que hace “chirriar” a los cantos en cada giro, por el que podía haber sido EL BAJADON, llegamos de una pieza a pie de monte …
… donde algún pedacito de buena nieve crea falsas esperanzas,
 pero por la DURA realidad 
y nieve entramos en la canal de in Pecico …
… y tras sobrevivir a la angostura con nieve encostrada, tras otra sinfonía gélida que algo mas dejo gozar y un rato de paz sentados tan ricamente en el blanco paraíso.. retornamos a Bachimaña, teniendo que seguir para abajo a  poner punto final a dos días de “tableo pirenaico” y a mi breve blanca estación aunque vendrá la primaveral😜 .
Foto de Leyre
Ós

03 marzo 2025

“LA ESQUIADA” del Collado de Infiernos


Siendo momento de pensar en cómo poner la guinda al finde, en un día que se espera de “postal”.. much@s estarán en ello, pero nosotr@s estamos en ello y en seguir un poco más, para lo que tenemos sobre la mesa dos días de blanco monte en el entorno de Bachimaña y múltiples podría decirse que infinitas opciones 😜.
 Tras un sábado con doble de monte, uno breve que se siente en la patas y otro largo de solo mirar en una pantalla, acarreamos cierto desfase horario para mal y nos ponemos en planta a duras penas cuando él despertador manda. Mientras afuera el cielo quiere ir a tonos de azul claro, la motivación junto a la cafeína surten su efecto y adelantando a posibles jaleos en el asfalto, “saltamos” de valle pirenaico y nos presentamos en Baños de Panticosa ni muy temprano ni demasiado tarde. Viendo desde el primer instante mucha gente, nos metemos hasta “la cocina” y.. por supuesto que junto a Casa de Piedra no cabe ni un alfiler  cosa que ya imaginábamos . Sin demora reculamos y a orillas del lago, con mejor panorama y la gente emprendiendo sus caminos, echamos el ancla. Veloces calzamos botas de esquí o monte según preferencias revisamos equipaje a la vez que el equipamiento, enganchamos tablas a la mochila y preparad@s.. list@s que salimos en busca de blancas.

Yendo a contra de la mayoría ,que se tiran hacia las zonas del Garmo o Bazias,
 nos encarrilamos por el Bco. del Caldares. Guiados por las marcas
… entre denso pinar y estrechos pasillos rocosos vamos alejándonos
 del Balneario hasta pisar un poco de blanco en el llano de Bozuelo.
Sin ser suficiente para “adelgazar” mochilas, continuamos pateando
sobre dura nieve, algunas zonas peladas y otros pasos con hielo …
… salimos de las angosturas bajo la cuesta del Fraile, donde sí
 se ve blanco BLANCO pero preferimos calzar ,perdiendo
menos tiempo, y apostando sobre seguro en el refugio.
Por profunda huella y varios tramos de blanquecina ausencia, vamos zigzagueando durante doscientos metros de rampa sin tregua …
… dejando a nuestros pies el circo de la cascada del Fraile, acabando a
orillas del Ibón Bajo de Bachimaña y seguido a las puertas del refugio.
Recabada info en el refugio que nos dicen que para Tebarray y llegar a buena hora mal, aligeramos mochilas y sacamos esquís a escena. A pesar de lo dicho, hemos venido a jugar y pensando que por lo menos al collado.. partimos del refugio bordeando el semi-helado ibón bajo por el lado contrario al camino de verano …
… para caer sobre las sólidas aguas del ibón superior, alias
 “camino de invierno”. Foqueando por encima de las aguas
 y siguiendo las cientos de huellas …
… apuntamos hacia el valle de los famosos ibones azules
 y cruzándonos con apenas un@s pocos que ya vuelven …
… ganamos altura por largo rato, avanzando por suaves pendientes en paralelo a la línea rocosa de las agujas de Bachimañaña-Arnales …
Foto de Leyre
… mientras a la espalda asoma el “GRAN FRANCÉS”
 y tras pasar de largo el ibón azul inferior …
… alcanzamos el ibón superior y vemos allá lejos, pareciendo
tocarlo casi con la punta de los dedos , el collado de Infiernos.
Just@s de horario para pillar buena nieve y que la gestión sea la planeada,
entre las llamativas formaciones de Las Marmoleras …
… y la imponente N de Infiernos …
… lanzando un último “ARREÓN”, subimos en absoluta
 soledad otros tantos cientos de metros …
… plantándonos en el collado de Infiernos, punto en que zanjamos “la partida” y consiguiendo gran parte de lo que queríamos.. ni tan mal y bien content@s.

Foto de rigor en el Collado de Infiernos.
Leyre y☝
Sacando chispas al breve momento de estar en las alturas; a la que preparamos quitamos focas y “llenamos depósitos”.. admiramos el panorama. Vignemale destacando en la estampa hacia el pirineo central …
… hacia el lado contrario, el protagonista es Tebarray, pero más allá..
las cumbres de los valles occidentales dictan que llega el momento.
Finito el buen rato, llega el mejor. Orientando tablas para abajo, comenzamos el descenso sobre nieve dura que tras los giros justos cambia completamente…
…dejándo“firmar” las laderas con gozoso recital de giros …
… que nos devuelve con tramos de “perrear” y alguno de remar a los ibones de Bachimaña y sumando un poquito más de desnivel por si había sido poco direct@s al refugio zanjando el primer episodio.
Foto de Leyre
Ós