martes, 16 de febrero de 2021

Vuelta de las murallas de Lokiz

Adelantado a la segunda casilla del 2021, hay muchas cosas que no cambian y precisamente no son las mejores las que se parecen quedar tal cual. Entre ellas sigue sin querer "caducar" la suscripción a la meteo revuelta y pasada por agua; que se va extendiendo como una plaga, recortando posibilidades de pillar la vuelta a está mala costumbre, y la vaticinan , con sus mas y sus menos, hasta casi cerrar la semana. "De Guatemala a Guatepeor" es lo que piensa la inmensa mayoría. Pero si cuatro gotas no son ni por asomo motivo suficiente para truncar la rutinaria vida del ciudadano medio. Por qué lo van a ser para acabar con los planes e ilusiones?
"Cerrando los ojos" ante el parte de meteo los primeros días, "fantaseamos" a lo largo de la semana con varios de los destinos que entran en el abanico de posibilidades, amplio pero no tanto como nos gustaría. Una a una las vamos descartando para otro momento conforme pasan los días y la situación se va viendo mas clara, o en este caso más oscura. Para cuando nos suelten "la correa" , tendremos casi encima " lo malo" y nos veremos entre la espada y la pared. Ser espectadores desde el lado seco o a sufrir sus humectantes consecuencias.. a la espera de cerrar otro bucle más; volviendo a gastar "el último cartucho" con leve y suficiente mejoría por las tierras del Ega, convertidas en nuestr@ edén meteorológico.

Rebosando agua por todos los adoquines que alcanza la vista y "oliendo" desde la ventana el "pastel" que se ha amasado por los montes, da comienzo el día prometido. Viendo todavía mucho gris, con algunas manchas claras que quieren ir imponiéndose en el firmamento, nos preparamos liger@s y a la calle, que lo bueno escasea últimamente y hay que aprovecharlo.
La historia se repite una vez más, pero el destino no. Con la típica llovizna de asustar , acompañada de un fresquillo que casi habíamos olvidado; recaemos justo frente al muro rocoso medio conquistado por nubes bajas y encuadrado entre nuestros dos últimos escenarios montañosos:  Kodes y Urbasa. Remando a la contra del río Urederra nos aproximamos hasta el extremo oriental de la salvaje Sª de Lokiz; pudiendo intuir entre tanta nube, un ligero y blanco recubrimiento en las cumbres más altas de esta. Metiéndonos en sus faldas,  custodiadas por "el ejercito enemigo de los cutos", nos "perdemos" hacia el pueblito de Galdeano; donde al lado de su iglesia sin armar alboroto, nos ponemos en las marcas listos para partir.

Compaginados con el sol que asoma tras las cumbres limítrofes de Urbasa,
nos encaminamos hacia lo más escondido del Valle de Metauten ...
... avanzando a la carrera por amplias pistas y  algunos barrizales durante larga y casi llana tirada a los pies de la gran muralla de Lokiz ; atravesamos  las tierras de Muneta y Aramendia ...
... pasando después a las de Ganuza, en cuyas impresionantes
 paredes se encuentra " el hit del momento" ...
... y "un paso más allá", sin llegar a Ollobarren,
 terminamos con el trayecto de "ida" por las bajuras.
Orientados por las marcas blancas y amarillas de la PR-NA 184 y envueltos por la vegetación, subimos sin tregua por la tiesa senda de la vertiente soleada de la "olvidada" Sª de Lokiz ...
... contemplando en la lejanía las grandes cumbres riojanas, que combinan a la perfección nieves y sol ...
... hasta encontrarnos con las verticalidades y ante
su "punto débil",  el ojo de Ollobarren. 
Atravesamos corto y oscuro pasadizo ...
... apareciendo a un sombrío rincón entre grandes moles rocosa, pudiendo
 seguir solo por un resbaladiza sendilla a la altiplanicie del macizo "estellica"
Del mundo rocoso saltamos al "reino verde"  y dejando a la zaga las alpinas Sª de Kodes y Kantabria ...
... llaneamos a toda pastilla en dirección a la inadvertida cima de Sardegi, alejados de las paredes, por un amplio pasillo sobre alfombra de otoño y envueltos por la vegetación...
... saliendo frente a la Ermita de Santiago de Lokiz ,
con algo de gentío e iluminada por  agradables rayos del sol ...
... con cuyo calorcillo aprovechamos para recargar baterías
y admirar tímidamente los parajes.
Apenas recorridas las alturas, tornamos la mirada a las bajuras y  entre matorrales, "caemos" hacia el corte que da a Ganuza ...
... continuando por el Bco. de Zologorri en descenso raudo y veloz, "serpenteando" el sendero PR enclavado entre los verticales hogares de los buitres ...
... y a punto de entrar en el cauce, nos desviamos de lo marcado ,
a la base del muro rocoso en busca del tan afamado lugar.
"Limando" la pared avanzamos suaves y con disimulo hacia arriba, dejando atrás la Ermita de Santiago y la brecha del barranco, hasta dar con un amplio y pisado canalizo que da acceso a "las entrañas" de este paraje.
Por una estrecha chimenea (equipada con  cuerda) trepamos fácilmente sobre escalones, unos cuantos metros a en medio de la pared ...
... donde nos metemos a gachas en un túnel algo más largo que el anterior y que alumbrados por frontales nos dirige al peculiar agujero de San Prudencio.
Un golpe de suerte nos deja disfrutar del sitio en su  más puro esplendor, totalmente solos; antes de volver al mundo exterior y comenzar "la procesión" al agujero.
Con el valle de Metauten a nuestros pies y por detrás la parte de Lokiz que alberga el ojo de Ollobarren ...
... continuamos, alejándonos del "jaleo", a media ladera por estrecha y sinuosa senda buscando "hacer mas pequeñas" las paredes a las que vamos pegados ...
... con impresionantes bóvedas y monolitos esculpidos por la naturaleza ...
... y en cuanto nos manda la traza, las atacamos directos por el pedregoso y encajonado puerto de Ganuza ...
... volviendo ,por última y definitiva vez, a lo alta de la meseta de Lokiz.
Sobre los vertiginosos parajes de la "segunda planta" ...
... con vistas a las vecinas Sª de Urbasa-Entzia y extendiéndose ante nosotros un infinito mar de bojes ...
... perfilamos los abismos a la carrera sin apenas desnivel, dejándose notar ya algo de cansancio, entre caminillos de cabras llenos de "trampas" y comidos por el boj ...
... llegando al "punto blanco" que destacaba entre
la inmensidad vegetal, la cima de Sartzaleta (1110 m).
Queriendo salir del infierno de bojes, jabalineamos un pedazo ; antes de bajar en un abrir y cerrar de ojos ,por lo que casi nos parece una autopista, al puerto de Aramendia.
Apuntando al extremo de la Sierra que cae sobre el Urederra y
se alza frente a Urbasa, llaneamos todavía un poco más entre matorrales...
... siguiendo los rastros del camino entre los últimos puertos del valle de Allín como buenamente se puede; acabamos engullidos por el hayedo y subiendo la pequeña "pirámide" con un apretón final ... Foto de Leyre
... donde se acaba el "sudar" en la tupida cima de Lokiz (1121 m).
Sin demasiado panorama desde las alturas y con "las pilas a punto de agotarse"; nos lanzamos dirección al bco. de Basaula entre el arbolado a la vez que bordeamos el techo de Lokiz ...
... pasando cerca de la inadvertida fte. de San Cosme y contemplando el bonito circo que ve nacer el Urederra ...
... tras lo que dejamos atrás la vertiente de Las Amescoas
y la impresionante y vertical aguja de Illusia ...
... nos recibe de nuevo en el valle de Allín, descendiendo como cohetes casi medio kilómetro vertical entre la espesa vegetación y piedra suelta del pto. más septentrional de la sierra ...
... retornando al tranquilo pueblito de Galdeano con equivocación por un fangal preparado por las vacas y completando la bonita vuelta  alguna superando con creces lo que pensaba que no podía hacer a las verticales murallas de Lokiz.


Foto de Leyre






🗻Del Rìo🗻

2 comentarios:

  1. Hola Oscar.

    Viendo los primeros compases, parecía una carrerita para estirar las piernas, pero luego, se torna un recorrido muy entretenido, con pasos bien chulos, en forma de chimeneas o ojos.

    Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Aupa Eduardo. Si al principio es un recorrido un tanto "descafeinado", aunque las vistas de los paredones son chulas y va perfecto para entrar en calor suavemente jejej.
      Lokiz tiene unos rincones que son verdaderos tesoros =)

      Saludos

      Eliminar