lunes, 4 de abril de 2022

Gallinero "sin gallinas" pero con esquís

Todavía regocijándonos de lo bueno, sin darnos cuenta el finde casi ha volado que mal repartida está la vida y después de casi todo el invierno, el incansable equipo de cuatro nos juntamos en Benasque. A duras penas, de lo agusto que se está, ya de noche plegamos a lo más alto que se puede de la estación de Cerler y mañana con un plan de "esquí civilizado" que han pensado Yoli y Aitor para redondear el finde, será otro día.
Descolocados un tanto en horario e intuyendo más nubes de la cuenta por arriba, desperezamos tranquil@s en Ampriu mientras las cafeteras empiezan a borbotear. Conforme va amaneciendo y nosotros poniendo a punto cuerpo, mente y equipo; seguimos con la esperanza de que "el marrón" o en este caso lo gris vaya disipándose.. pero por ahora no parece querer. Sin perder ni un poco la esperanza, antes de que habrán la estación y comience el jaleo, calentamos cargando las tablas por el parking y nos lanzamos a "la conquista" del punto más alto de la estación de Cerler.

Campando no demasiado temprano a nuestras anchas por las pistas de Cerler;
dirigimos las puntas de los esquís hacia las alturas para foquear
sobre la "arada" pista de ixarsos enmarcados por las "desnudas" laderas
del pico Cerler y la blanqueada vertiente N del cordal Gallinero-Basibé ...
... subiendo al collado del Ampriu, dejándose ver al poco l@s primer@s esquiadores
pero el espectáculo hacia el vecino macizo de Posets queda para otra vez .
La suerte de que el Gallinero se vaya despejando
 brilla por su ausencia  ...
... y con lo malo ganando terreno en lugar de retirarse hacia abajo,
provoca que las dudas de que es mejor nos asaltan
e incluso suena el darse media vuelta ...
... pero manteniéndonos "reci@s" en nuestra idea; nos unimos a la pista azul de la Perdiz Blanca, subiendo primero por lo último que queda limpio de color gris y una vez engullidos por la monotia y la nula visibilidad, guiados por los pivotes de la estación seguimos remontando las laderas de la casi solitaria montaña ...
Foto de Yoli
... hasta lo más alto que puede llegar cualquiera sin sudar
ni un poco de esfuerzo y donde decidimos plantarnos,
porque tal y como esta.. no merece la pena seguir más. 
En la "no cima" del Gallinero (2620 m)Aitor, Leyre, y Yoli.
Foto de Aitor

Guarecidos por un saliente rocoso y todavía  cubiertos completamente por un manto
de nubes que nos impide ver más allá de nuestras narices, tras echarnos encima algo
más de ropa preparamos todo para bajar. Quitar focas y a la mochila antes de que se
las lleve algun soplido. Fijaciones y botas a modo esquí. Para justo antes de salir, con
un par de meneos a las patas que las hace a la idea de lo que viene, nos ponemos
 en la línea de salida más tiesa que hay desde arriba.
Las nubes siguen sin ceder terreno, pero tampoco van a más y entramos sol@s
en la pista de marmotas; desbastando los cantos en cada giro por la dura nieve
 y las tiesas pendientes occidentales del Gallinero ...
...  hasta que volvemos a ver la luz , cuando
 lo más divertido a pasado a la historia ...
... y con visibilidad total, pero con abundancia de gente por todos lados,
retornamos al collado de Ampriu; desde el que entre terreno a medias
 tintas surcamos las pistas bajo el Pico Cerler y zanjamos un día más
sobre las tablas.. pensando en que "se va viendo la luz del final del túnel".

Foto de Leyre
🗻Del Rìo🗻

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