viernes, 28 de enero de 2022

El "ocho" de Anayet- Sarrios

Haciendo un esfuerzo sobrehumano para no dejarme llevar por las buenas costumbres de empezar el día al son del sol en estas jornadas en que las nieves están duras y traicioneras, tras unas cuantas vueltas en el calor del saco.. acabo saliendo al frío mundo entre montañas. Poniendo sobre la mesa un "pozal" caliente y algo que remojar, avivo de buena mañana el fuego que uno tiene dentro, a la vez que me voy "acicalando" para la faena sobre las tablas y el poco calor del invierno va haciendo acto de presencia.
Con dos ideas rondándome la cabeza, me acerco a Formigal. La más apetecible, adentrarme en lo salvaje que rodea al formidable Anayet.. pero la situación vivida días anteriores me hace no tenerlas todas conmigo y pensar si el esquiar va a ser más un suplicio que otra cosa.  Ante tal inseguridad me decanto por la otra opción, menos encantadora pero que en grata compañía no tardaré en disfrutar, y en cuanto me meto en las botas.. al lío 😜.

Dejando a la espalda un horizonte de altura ...
... por un lado de la pista de Anayet, molestando
 nada o lo mínimo, voy por una nieve que ni por asomo se
acerca a lo que se decía remontando las rampas de
 la vertiente N del pico Lapazuso ...
... hasta el collado que comparte con el pico Campo Troya,
donde algunas nubes "fastidian" el panorama que
se puede contemplar hacia los dominios del antiguo volcán.
Quitado todo lo que hacia de "ancla",
por los tubos que caen hacia el E del collado
cambio de valle disfrutando por suerte de
una solitaria esquiada, tan buena como corta.
Por delante se abre el valle de Sarrios "conquistado" por hierros, pero si miras más alla puede uno deleitarse con la verdadera belleza del entorno y de paso poner las focas para ir hacia el siguiente destino. 
Solo pero en compañía, voy valle arriba sin prisa ni pausa ni casi pendiente, alejándome del valle que empieza a dibujar el rio Gállego y de las grandes
moles que lo presiden ...
... mientras el pico Royo, que por suerte las nubes no se
 meten con él, me lleva embobando por rato ...
...  y acabo quemando hasta el último gramo del desayuno para ganar la helada rampa final del collado de Izas, que me deja en el pequeño paso asomándome al anubarrado canal de Izas y al muro N de la Pala de Ip.
Antes de que las nubes vuelvan a engullirlo todo, 
doy rienda suelta a las tablas y desciendo medio valle por
la pista de Sarrios 
entre grandes peligros añadidos al lugar.
Por última vez "sudo" una cuesta más al amparo de las caldeadas laderas de Lapazuso, mientras por detrás se va descubriendo tras las alturas de Formigal el extremo occidental de la Partacua y la muy llamativa pirámide de Escarra ...
... apareciendo de nuevo en el primero de los collados,
donde sin demora me lanzo a enlazar los últimos
 giros del día por el valle de Anayet ..
no camino del final, sino del principio de la próxima.
🗻Del Rìo🗻

2 comentarios:

  1. Hola Oscar.

    Bueno, no es lo mismo, pero tampoco se pasa mal el día, foqueando por la estación de esquí de Formigal. Ofrece bastante posibilidades y al ser bastante grande, se puede estar un poco alejado del bullicio.

    Salud y montaña.

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  2. Que tal Eduardo =)
    NOooo jeje, viene de lujo el ir por estacion para estos dias en que fuera de pista estaba todo tan duro y que no transformaba con este timido solecillo y encima estaba sin compi.

    Ya has estrenado temporada de esqui? o todavia se resiste? jjj :P

    Saludos

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